Considerando un precio promedio de $2,71 para enero 2016 vencido (según Subsecretaría de lechería de la Nación), surge que la leche cruda representó el 20,8% del valor de góndola de una integración láctea (conjunto de productos), valorizada a precios de Ciudad Autónoma de Buenos Aires (IPC CABA).
La participación de Enero 2016 se ubica 8 puntos por debajo de la media observada durante los últimos 10 años (28,8%) y 7,9 puntos por debajo de la participación que tuviera la leche cruda un año atrás (28,7%).
Entre enero 2015 y enero 2016, se observa un significativo ajuste (en moneda constante) tanto en los precios de leche cruda (-34%) como en el valor de los lácteos que se comercializan en el mercado interno (-9%). Como el ajuste de precios en el mercado de leche cruda ha sido mayor que el observado en el mercado de lácteos, ha disminuido la participación de la primera en el valor final de los productos procesados y comercializados.
Una gran abundancia de leche cruda y por ende de productos lácteos en el mercado interno es lo que mantiene los precios bajo fuerte presión descendente. Hasta tanto el mercado no recupere su equilibrio entre lo que se ofrece y lo que se demanda, ya sea por caída de producción y/o por la expansión de los envíos de lácteos al exterior, continuarán bajos los precios de los productos lácteos-en términos reales- beneficiando a los consumidores domésticos, pero poniendo en juego la sustentabilidad de muchos actores de la cadena láctea, en particular de los tambos, quienes integran el eslabón que está absorbiendo la mayor parte del ajuste.
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